Después de Sudamérica, el MotoGP llegará a Norteamérica para disputar la 3ª prueba del Mundial de 2019, programada del 12 al 14 de abril en el Circuit of the Americas (Austin, Texas). Diseñado por el arquitecto alemán, es uno de los pocos circuitos del mundo en el que se disputa el Mundial de Motociclismo y la Fórmula 1: el tiempo por vuelta de los monoplazas es medio minuto inferior al de las motos.
Algunos tramos se inspiran en las célebres curvas de algunos circuitos históricos. La pista texana se caracteriza por la impresionante inclinación de la recta que desemboca en la primera curva a la derecha: entre el punto más bajo y el más alto del circuito hay un desnivel total de 41 metros, con consecuencias fácilmente imaginables para los pilotos que yerren la frenada en los tramos en bajada.
El trazado de Austin presenta una dificultad media para los sistemas de frenos. Los técnicos de Brembo, que asisten a todos los pilotos de MotoGP, han asignado un nivel de dificultad 3 (en una escala de 1 a 5) al Circuit of the Americas. La misma dificultad que los circuitos de Losail y Termas de Rio Hondo; sin embargo, Jerez, donde se corre dentro de tres semanas, presenta un nivel de dificultad 4.