Del 7 al 9 de octubre el circuito Suzuka International Racing Course acogerá la
17ª carrera del Mundial de Fórmula 1 de 2016.
Situado a 150 km de Osaka, en la ciudad homónima de la prefectura de Mie, fue construido a instancias de Soichiro Honda. Se inauguró en 1962 y fue el primer circuito japonés en cumplir la normativa internacional, pero acoge la Fórmula 1 solo desde 1987. En 2003, se hicieron algunas modificaciones en el circuito, con las que perdió unos cincuenta metros.
También en Suzuka, al igual que en todos los circuitos muy "guiados", las curvas rápidas (sobre todo la legendaria 130R curva, en la que los monoplazas entran con el acelerador a fondo) determinan frenadas no muy difíciles. De hecho, los coches solamente afrontan una frenada especialmente brusca.
Según los técnicos Brembo, que han clasificado los 21 circuitos del Mundial con una escala de 1 a 10, el circuito de Suzuka pertenece a la categoría de los circuitos poco difíciles para los frenos. Al circuito japonés se le ha asignado un índice de dificultad 4, idéntico al valor obtenido por Spa-Francorchamps y solamente por encima de Silverstone e Interlagos.