La evolución de los discos de freno en Fórmula 1

06/09/2016

 De 100 a más de 1200 agujeros de ventilación: historia de la innovación Brembo en los últimos 10 años

​Salvo raras ocasiones, en la Fórmula 1 actual la gran parte de los adelantamientos es en frenada. Por esta razón los sistemas de frenos tienen que consentir paradas inmediatas en muy poco espacio. Pero su uso siempre más intensivo puede causar un recalentamiento excesivo de los discos, con consiguiente reducción de las prestaciones.

Para prevenir este riesgo los ingenieros de Brembo han introducido en los discos los agujeros de ventilación radiales. El avance de los estudios ha permitido aumentar paulatinamente el número de los agujeros y disminuir sus dimensiones: hace diez años, en 2005, los agujeros de ventilación de un disco de Fórmula 1 eran unos 100.

Ya tres años después su número era el doble y también eran el doble las filas de agujeros en dirección axial. Gracias a la fluidodinámica computacional (CFD), es decir el estudio de la fluidodinámica por medio de ordenador y los progresos en el apartado de la elaboración mecánica del carbono, en 2012 el número de agujeros de ventilación en cada disco de freno Brembo había aumentado a unos 600, al realizar una tercera fila de agujeros.

La evolución de los discos de freno en Fórmula 1 

 
BREMBO F1 brake disc  



El incremento de la superficie de carbono del disco expuesta a la ventilación, garantiza una mayor disipación del calor, reduciendo la temperatura de funcionamiento, que en un sistema de frenos de Fórmula 1 puede llegar a superar los mil grados.

Siguiendo por este camino, en el campeonato 2014 los monoplazas de Fórmula 1 utilizaron discos con más de mil agujeros de ventilación.

Además, los discos de freno Brembo no son todos iguales y se fabrican para maximizar la sinergia con las tomas de aire de los diferentes monoplaza.


 


Para mejorar todavía más el flujo de aire, este año el número de agujeros de ventilación de los discos Brembo rebasa los 1.200. Los agujeros, ahora dispuestos en 4 filas diferentes, miden 2,5 milímetros de diámetro cada uno y se realizan uno por uno utilizando maquinaria de precisión: para realizar los agujeros de un solo disco se necesitan entre 12 y 14 horas de trabajo. A estos niveles la precisión es fundamental: la tolerancia de mecanizado es de tan solo 4 centésimas.