Del 5 al 7 de julio, el Campeonato Mundial de Superbikes vuelve a su circuito natal, Donington Park, para la 8ª cita de la temporada. Efectivamente, el 3 de abril de 1988 Donington Park fue el escenario de la primera carrera de la primera edición del Campeonato Mundial de Superbikes.
Situado en las colinas del Leicestershire, Donington Park es una pista que alterna dos secciones muy diferentes: el primer tramo es rápido y muy fluido, en cambio, el segundo tramo presenta muchas frenadas secas que lo hacen parecer un circuito stop-and-go.
Otro problema son las bajas temperaturas que dificultan que los frenos alcancen una temperatura adecuada: en ambas carreras del 2015 la temperatura del asfalto fue de tan solo 21 grados, mientras que aquella del aire fue de 14 y 15 grados, y esto sin llover.
Según los técnicos Brembo que trabajan en estrecha colaboración con 15 pilotos del Mundial de Superbikes, Donington Park es un circuito sumamente duro para los frenos. En una escala de 1 a 5 se le ha atribuido un índice de dificultad 5, igual que él de las pistas de Imola y Buriram.